La vida es un espejo que refleja nuestro corazón, de modo que si nos llenamos el interior de insatisfacción cada vez ocurrirán más acontecimientos que quieran expresar ese descontento.
Y al contrario, si tenemos el corazón lleno de agradecimiento, ocurrirán más acontecimientos que nos harán sentir más agradecimiento.
Me encantan las historias sencillas que contienen enseñanzas muy complejas y en este pequeño libro, Yoshinori Noguchi, nos presenta una ley inspirada en la filosofía oriental, la ley del espejo, una sencilla ley que nos ayuda a comprender cómo la realidad de nuestra vida es un reflejo de lo que se debate en nuestro interior, siendo esto último la causa de los problemas que se nos presentan en la vida.